SACERDOTE NERY MIJANGOS

Durante años he tenido el gusto de conocer a una persona que el día de hoy puedo etiquetar como un Revolucionario en busca de llevar la fe y la palabra de Dios de una forma diferente, la entrevista fue como una autorrevelación de la realidad que sufren los indigentes en las calles de Guatemala. 

Lema o dicho:  

Tengo varios, pero hay dos que sobresalen de todos:

·        Mi corazón palpita en el sagrario y mi corazón camina por las calles.

·        Mi vocación está donde está mi felicidad.

 ORÍGENES

¿Cuándo y cómo se dio cuenta que quería comenzar el proyecto?

El sueño empezó con el deseo  de ayudar a la gente. La primera casa hogar nació hace 13 años en Santa Catarina Pinula, donde actualmente están las mujeres. Hubo dos sucesos en mi vida que iniciaron este proyecto,  una fue una vivencia espiritual en el Perú que me obligo a regresar a Guatemala  para poder dedicarme a la gente necesitada, otra sucedió cuando vi a un hombre que estaba recogiendo comida en la calle.  Tuvimos una conexión de mirada, donde me parecía que Dios me reclamaba. Fue un reclamo en el que este hombre  me decía “mira yo estoy aquí comiendo y tu estas allá tranquilo”. A partir de ese entonces me surgió la idea se intentar servir a Dios a través de las personas desamparadas.

Antes del inicio del primer albergue quise saber cómo se siente la gente indigente al tener que dormir en la calle, pensando en eso decidí dormir en las calles bajo las pasarelas tapándome  con cartones. Inicie el proyecto con un  sacerdote salvadoreño que se me unió, pensando en su seguridad decidí alquilar una casa de bajo costo, comenzamos de la nada. Al principio comíamos, dormíamos y celebrábamos la misa en el suelo, poco poco alguien nos fue ayudando con víveres, cuando se dieron cuenta las personas que abemos personas que ayudamos desinteresadamente fue cuando nos ayudaron con más vivires  e incluso pagos médicos de algún enfermo y así gente de buen corazón nos fue ayudando.

Siempre hubo la necesidad y el deseo  de tener  un terreno propio para el albergue, para poder ayudar a la gente,  y poder ampliarlo para darles a los indigentes un servicio alimenticio, de salud, espiritual y psicológico.  Actualmente se nos donó un terreno en el Jocotillo, Santa Rosa, es este viven los varones. Aunque  necesitamos recaudar dinero para poder traspasarlo legalmente a nombre del albergue, por necesitamos pagar el impuesto sobre la renta

Estamos rezando nada más, estamos alquilando la casa de mujeres en Pínula, a puro alquiler a puro providencia. En ningún momentos le hemos echado tantas ganas  al albergue de mujeres porque son poquitas, también no tenemos otro terreno para darles un hogar más digno y grande, estamos esperando que Dios provee

En muchas oportunidades  me sentí como un cura falso y mentiroso que hablaba bonito del amor pero que no lo practicaba. Ahora me siento pleno, pues hablo del amor pero ya lo he practicado. Lo he vivido: rasurando a alguien, alimentándolo o limpiándolo.

¿Trabajó en algo que le ayudara a obtener conocimientos y experiencia que después le haya servido para desarrollar la idea del negocio que inició?

Una parte de lo que conozco  me lo dieron en el seminario, la parte de la formación de sacerdote, porque se supone que se tiene que tener formación y estar capacitado para poder incurrir en todos los aspectos y áreas de la sociedad, pero aparte de eso personalmente hay cosos que yo desconocía,  me tuve que instruir en unas cosas, por ejemplo yo tenía algunos  conocimientos de psicología, un poquito de enfermería, de derecho, de economía, pero hay otras cosas que uno tiene que autoformarse e informarse de temas que le interesa, porque aunque una persona sea profesional siempre hay algo que desconoce y una persona que conoce todo de un poco necesariamente tiene que investigar el tema propio que le incumbe en ese momento de la realidad.

¿Algún otro miembro de su familia tiene un negocio propio?

Mi hermana participa como una de las encargadas de las áreas de las mujeres.  Mi madre era muy dada a cualquier persona que se le acercara a pedir ayuda.

 EL EMPRENDIMIENTO

¿Por qué decidió iniciar el proyecto que dirige ahora?

Porque vi la necesidad a las personas que no tienen nada y desde siempre había querido formar un proyecto donde me diera la oportunidad de ayudar a la gente.

¿Qué aspectos de su personalidad le ayudaron en la primera fase del emprendimiento?

Creo que fue una cuestión espiritual, el hecho de querer servirle a Dios a tiempo completo y a deberme solo a él, me llevo a escuchar esa voz, de servirle a él a través del hermano necesitado, dos: sueño con tener un área para jóvenes y señoritas de la calle que aparentemente no tienen por qué soñar, porque creo en las segundas y terceras oportunidades, porque Dios me ha dado muchas oportunidades, e incluso hasta el hecho de estudiar, entonces esa es una oportunidad que Dios me dio y eso indica que si a manos llenas Dios da, a manos llenas tenemos que dar.

Sobre Dios, el amor, la solidaridad y todas las cosas solo crecen cuando las compartís, sino las compartís te volves egoísta y empieza a morir todo lo bueno.

¿Qué hace cuando las cosas no salen como lo planeó? ¿Cómo enfrenta los problemas?

Confiar en que Dios mejorara la situación, pienso que hay que echarle más ganas para salir adelante, siempre he creído que en los momentos de crisis no son perdidas, sino que son oportunidades para superar tu situación de debilidad, ningún problema lo he considerado como un obstáculos, sino como un objetos para sobrepasa ese obstáculos y para descubrir en mi vida de lo que soy capaz, hay una frase de San Pablo “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”. Nunca son fracasos, son ganancias

¿Cómo fueron los primeros años del proyecto? ¿Qué ha cambiado en el tiempo?

Para experimentar esa  misma vida de un indigente, algunas veces dormí bajo la pasarela tapados con cartones y cuando comenzó el proyecto la idea era estar así durante un buen tiempo, pero Dios me permitió iniciar este proyecto con un hermano salvadoreño y entonces me vi obligado por su seguridad a ver como alquilábamos una casa lo más barato posible.

¿Cuál fue su mejor y su peor experiencia como líder del proyecto?

De todas mis experiencias buenas o malas, he sacado un aprendizaje que me ha ayudado a crecer.

¿Qué haría diferente hoy si pudiera iniciar el proyecto otra vez?

No haría nada diferente, absolutamente nada, porque hemos crecido con el proyecto y lo hemos hecho crecer a pura experiencia. Comenzamos sin dinero y eso nos dios una experiencia grande: la confianza en Dios. Si en tus sueños está el dinero son sueños baratos y cualquiera pudiera pensar ahora por qué no lo comencé haciendo un ahorro, por que no lo comencé pidiendo de una institución, pues en realidad las cosas grandes comienzan pequeñas desde abajo y el dinero no es motivo para estancarse y no alcanzar tus metas.

¿En qué ha cambiado tu vida desde el inicio del proyecto hasta el día de hoy?

En mi vida religiosa como sacerdote, te puedo decir que ahora me siento pleno, que no me siento mentiroso, hipócrita  de hablar del servicio, porque ahora creo que lo hago quizá no lo haga bien pero lo intento hacer, ahora soy libre para predicar de mis servicios, ahora pienso wow lo hago con autoridad y convicción ahora puedo hablar de eso.

En mi vida personal  te puedo garantizar que soy feliz, porque desde niño soñaba con ayudar a  agente, ahora lo estoy haciendo y me he ido descubriendo  algunas capacidades que tengo, no porque soy  buena gente o buen honda, sino porque Dios siempre que manda a alguien al mundo lo manda como paquete completo, es ese paquete van  cosa buenas, otras mas o menos y otras excelente y todo puede mejorar y crecer de acuerdo al acercamientos que se  tenga con Dios

En el albergue he notado que hay mucha gente buena, tengo señoritas de buen corazón que a veces son capaces de sacrificar su vida,  su tiempo,  que a veces sienten  nauseas,  que lloran, pero que aun así a pesar de toda su debilidad en su mundo de juventud son capaces de darle un sí a Dios.

Me he dado cuenta que en Guatemala y en el mundo entero no está perdido, hay gente buena.

Y aparte de eso me he dado en la cuenta que en  la calle y en las cárceles hay gente que no son malas y que han hecho cosas malas pero no quiere decir que sean malas en su ser y que solo están esperando una oportunidad de un amigo para recibir un abrazo,  un te quiero o un ánimo; hay mucha gente en la sociedad especialmente en Guatemala que  espera una oportunidad que la sociedad  les dé para creer en ellos mismos y demostrar al mundo que si se puede.

 MÁS ALLÁ

¿Qué ha aprendido en el tiempo que se ha dedicado a su proyecto?

Todo lo que he dicho.

¿Qué le recomendaría a alguien que desea iniciar su propio proyecto?

Si se quieren unir a nosotros bienvenidos, la casa ni puestas tiene cualquiera pude entrar. Y si quieren hacer algo que se lancen, que lo hagan, pero una vez advierto que esto no es de cobardes, fácil es comenzar y hacerlo por un mes, soportar las deudas y darle un pan a alguien en la calle que cuidar todas sus necesidades.

¿Recomienda usted que las personas inicien sus propios proyectos?

No les recomendaría porque es difícil, pero si se los pediría porque es necesario.

¿Considera usted que ha tenido éxito?

Sí, no como quisiera por que los quisiera tener mejor, pero ahí va caminando, el hecho de tener una persona menos en la calle, durmiendo en una cama eso ya es un éxito.

Sueño y lucho para poder ampliar estas casas y abrir mi corazón  para todo el mundo que lo necesite sea quien sea, para poder darle lo mejor posible, en lo material, espiritual y sentimental  ya que toda persona es compleja y se complementa con todas sus áreas, no puedo separar su sexualidad de lo espiritual, ni el cuerpo; la persona es un todo